La AMIA indicó que los aranceles quitarán oportunidades económicas y de bienestar a la sociedades de la región, generando “un caldo de cultivo” para las actividades delictivas que buscan combatir.
"Las tasas de interés más altas y las ganancias más débiles hacen que las estructuras de capital de algunas empresas sean cada vez más insostenibles”, destacó la firma de riesgo.